Si aún te estás familiarizando con el término estación de carga, prepárate para aprender sobre las estaciones de carga solares. Hoy te explicaremos en qué consisten y por qué son tan innovadoras.
La transición energética hacia un modelo más eficiente y respetuoso con el medio ambiente implica una serie de cambios y avances en nuestra sociedad. Además de nuevas fuentes de generación de electricidad y tipos de movilidad sostenible, existen una serie de palabras que, poco a poco, se están introduciendo en nuestro vocabulario diario. Así, aquellos que hace unos años nunca habían oído hablar de términos como estación de carga, turbina eólica o energía fotovoltaica, ahora han impregnado su lenguaje con estas palabras hasta el punto de utilizarlas inconscientemente a diario.
Bueno, hoy, con el objetivo de enriquecer aún más nuestro léxico, queremos profundizar en una palabra que está haciéndose un nombre: la estación de carga solar. De hecho, si todavía no te has acostumbrado a llamar estación de carga a los puntos de recarga de vehículos eléctricos -que todavía no son tan comunes como deberían ser-, ahora ha surgido un nuevo término que promete hacerse un hueco en revistas especializadas en energía y abrirse camino en los medios de comunicación gracias a proyectos innovadores.
¿Qué es una estación de carga solar?
Una estación de carga solar es un tipo de estación de servicio para recargar vehículos eléctricos que tiene una característica distintiva que la hace única: la energía utilizada en el proceso de recarga es 100% renovable gracias a una infraestructura de generación de energía fotovoltaica y un sistema de almacenamiento de energía mediante baterías. Esto permite proporcionar la potencia necesaria para realizar recargas ultrarrápidas a los vehículos eléctricos que lo requieran. Para ello, las estaciones de carga solar utilizan su propio parque fotovoltaico o aprovechan los que ya se encuentran en funcionamiento en las proximidades y están conectados a la red eléctrica.
Este tipo de estación de carga para vehículos eléctricos tiene una característica muy positiva, y es que ofrece una solución de carga de alta potencia en áreas donde el acceso a la red eléctrica es más débil o inexistente, como en zonas rurales o alejadas de grandes ciudades o vías de comunicación, que es donde suelen realizarse este tipo de inversiones. En este sentido, la estación de carga solar se presenta como una solución complementaria para seguir tejiendo una infraestructura de carga de vehículos eléctricos que nos ayude a democratizar la implementación de esta tecnología, tratando de poner fin a las habituales brechas de desigualdad que estas tendencias causan en la población rural.
La primera estación de carga solar en España
En definitiva, España parece destinada a albergar su primera estación de carga solar. Esta innovadora instalación se ubicará en la carretera Nacional 3 (N-3), cerca de Alarcón, en la provincia de Cuenca, y está siendo promovida por la empresa Eranovum, que define este proyecto como un concepto único con toda la potencia necesaria para proporcionar recargas ultrarrápidas a los vehículos eléctricos que lo necesiten. Según el desarrollador, esta instalación permitirá ahorrar 000 toneladas de CO2 al año, además de contar con cuatro puntos de carga ultrarrápida de más de 240 kW, con una ampliación prevista a ocho puntos para 203Para ello, la instalación se alimentará de un sistema de almacenamiento de energía con una capacidad de 300 kWh basado en la reutilización de baterías de segunda vida de vehículos eléctricos para mantener su funcionalidad al 100% en las horas en las que la luz solar no pueda suministrar las necesidades de los clientes. Por otro lado, la estación no contará con una instalación fotovoltaica propia, sino que se alimentará, a través de una conexión eléctrica, de la energía solar producida por los parques fotovoltaicos de Olmedilla y Sabinar, que tienen una capacidad instalada de más de 400 MW.
¿Cómo funciona la carga de vehículos eléctricos?
Los tiempos están cambiando, y la era en la que los vehículos de combustión eran los únicos en nuestras carreteras ha llegado a su fin. Hoy en día, los vehículos de combustión y los vehículos eléctricos conviven de manera cada vez más notable. La tecnología y la disponibilidad de los coches eléctricos han crecido significativamente en la última década y sus ventas representan ahora el 37% del mercado total en países como Noruega (líder absoluto), el 1,7% en Francia y cerca del 1% en España y Reino Unido.
Sin embargo, la carga de este tipo de vehículo es muy diferente a lo que estamos acostumbrados. Mientras que sabemos perfectamente cómo cargar nuestros coches y estamos empezando a familiarizarnos con los puntos de carga domésticos, que son muy similares a un poste con un enchufe, ¿sabemos cómo funciona una estación de carga rápida para vehículos eléctricos? Vamos a verlo.