La energía renovable es una de las soluciones más viables y sostenibles para el futuro energético de México. Aunque actualmente el país depende en gran medida de fuentes de energía fósil, como el petróleo y el gas natural, el potencial para el desarrollo de energías renovables, como la solar, eólica y geotérmica, es enorme. Sin embargo, es necesario un cambio en la matriz energética y una mayor inversión del sector privado para impulsar estos proyectos.
Viabilidad de la Energía Renovable en México
El patrón energético de México está dominado por fuentes de energía fósil, lo cual no es congruente con el potencial del país para el desarrollo de energías renovables. México cuenta con recursos naturales abundantes, lo que permite un desarrollo regionalizado de las energías renovables. Al norte del país se encuentra un gran potencial para la energía solar, en el centro la geotérmica y en el sur la eólica.
Según el Inventario Nacional de Energía Renovable, las energías con mayor potencial en México son la solar y la eólica. Sin embargo, en los últimos años, la participación de las energías renovables en la matriz energética ha disminuido, mientras que el gas natural ha ganado relevancia debido a su bajo costo y menor impacto ambiental.
En 2013, la generación de electricidad en México se distribuyó de la siguiente manera: el 82% provenía de fuentes fósiles, el 13% de renovables y el 5% de energía nuclear. La energía hidroeléctrica es la que tiene la participación más relevante dentro de las renovables, seguida de la geotérmica, la eólica y la solar. Es importante destacar que la energía solar ha experimentado un crecimiento significativo desde su introducción en 201
Con el objetivo de aumentar la generación de electricidad con fuentes renovables, la Secretaría de Energía (SENER) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) han desarrollado dos escenarios: el de planeación y el alterno. El escenario de planeación estima que para 2024 la participación de las energías renovables sea del 21%, mientras que el escenario alterno busca cumplir con las metas establecidas en la Ley para el Aprovechamiento y el Financiamiento de la Transición Energética (LAERFTE) y la Ley General de Cambio Climático (LGCC), que establecen que al menos el 35% de la generación de electricidad sea de fuentes limpias a partir de 202
Desarrollo de Proyectos de Energía Renovable
En ambos escenarios, se prevé un crecimiento significativo en la generación de electricidad con fuentes renovables. Según las proyecciones de la SENER, la generación total de electricidad de fuentes renovables aumentará de 41,956 a 100,220 GWh/a de 2012 a 2027 en el escenario de planeación. En el escenario alterno, se espera un crecimiento aún mayor, con una generación total de electricidad de 82,835 GWh/a de energía eólica y 38,879 GWh/a de energía nuclear para 202
Es importante destacar que en ambos escenarios se impulsa en mayor medida la energía eólica y, en el caso del escenario alterno, se incrementa la participación de la energía nuclear. Aunque la energía nuclear no es renovable, su inclusión en estos escenarios plantea un debate sobre la diversificación de la matriz energética y el papel del sector privado en el desarrollo de proyectos de energía renovable.
México cuenta con un gran potencial para el desarrollo de proyectos de energía renovable, especialmente en las áreas de energía solar, eólica y geotérmica. Sin embargo, es necesario un cambio en la matriz energética y una mayor inversión del sector privado para impulsar estos proyectos. El papel del Estado es fundamental para impulsar la transición energética mediante mecanismos de regulación y fondos de inversión, así como asegurar la eficiencia en la distribución de energía renovable a los consumidores.