Las energías alternativas son aquellas que provienen de fuentes naturales y renovables, como la solar o la eólica. Estas energías se presentan como una alternativa a las fuentes de energía convencionales, que utilizan combustibles fósiles no renovables y generan altas emisiones de gases de efecto invernadero.
Diferencias entre las energías convencionales y las energías alternativas
Las energías convencionales dependen de suministros externos, mientras que las energías alternativas tienen un carácter más local, favoreciendo la autonomía energética. Además, las energías convencionales generan residuos en el proceso de combustión de los fósiles, mientras que las energías alternativas no producen gases de efecto invernadero.
Tipos de energías alternativas
Existen diferentes tipos de energías alternativas, clasificadas en dos categorías: no contaminantes o limpias, y contaminantes.
No contaminantes o limpias
- Energía eólica: es aquella proveniente de la fuerza del viento, y se convierte en energía a través de molinos o aerogeneradores.
- Energía solar: se obtiene a través del sol y se transforma en electricidad mediante placas solares.
- Energía hidráulica: proviene de la potencia del agua y se genera en embalses.
- Energía geotérmica: se obtiene a partir del calor de la tierra.
- Energía mareomotriz: transforma la fuerza de los mares y océanos en energía eléctrica.
Contaminantes
Estas energías son contaminantes porque implican la quema de residuos orgánicos para generar energía. Algunos ejemplos son la biomasa y el biogás.
Ventajas de las energías alternativas
- Origen natural: Las energías alternativas provienen de fuentes naturales, lo que las hace más limpias y sostenibles.
- Inagotables: La mayoría de las fuentes de energía alternativas son inagotables, lo que garantiza su disponibilidad a largo plazo.
- Generación de empleo: La implementación de energías alternativas genera nuevos empleos en diferentes sectores, como la fabricación, ingeniería e instalación.
- Autonomía energética: Las energías alternativas promueven la autonomía e independencia energética de los territorios al no depender del abastecimiento de países con fuentes de energía convencional.
- Desarrollo tecnológico: La implementación de energías alternativas impulsa el desarrollo tecnológico en la producción y suministro de energía.
Panorama de las energías alternativas a nivel mundial
Según un informe de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA), durante el año 2020 se multiplicó la capacidad energética generada a partir de fuentes renovables en China, Estados Unidos, India y gran parte de Europa. La energía eólica, hidroeléctrica y solar fotovoltaica son las que mayor crecimiento han experimentado.
A pesar de los desafíos planteados por la pandemia del COVID-19, las energías renovables se mantuvieron fuertes frente a las energías convencionales, que experimentaron una disminución en la demanda. Se espera que durante el año 2021 se logre un aumento del 7% en la generación de electricidad a partir de fuentes renovables a nivel mundial.
Además, un estudio realizado por el grupo REN21 revela que en regiones como China, la Unión Europea y Estados Unidos, es más económico construir nuevas plantas de energía solar y eólica que mantener operaciones en centrales de carbón. Esto podría impulsar políticas públicas que fomenten la transición hacia las energías alternativas. De lograrse, se espera un aumento del 40% en la energía solar fotovoltaica para el año 2022, marcando el fin de cinco décadas de dependencia del carbón como principal fuente de energía.
Aspectos curiosos sobre las energías alternativas
El sol es la principal fuente de energía en la Tierra. La radiación solar llega a nuestro planeta en forma de luz y calor, y es aprovechada de diversas maneras, como la energía eólica, hidráulica, solar térmica y solar fotovoltaica.
Además, las plantas utilizan la radiación solar para realizar la fotosíntesis, y la materia orgánica de los seres vivos se acumula en el subsuelo, formando los yacimientos de petróleo, gas natural y carbón. Estos yacimientos son, en esencia, energía solar acumulada y se consideran combustibles fósiles.